Desde que yo recuerdo gatos y perros han convivido con nosotros sin problema alguno. Salían y entraban por patios y corrales, habitaciones diversas y comían lo que nosotros comíamos. Los años aquellos se perdieron entre las comunidades de pisos con escaleras y ascensores y perros y gatos se acostumbraron a sentarse en balcones y terrazas esperando. los perros salir a pasear con sus dueños.
En los campos cercanos al pueblo se cercaban las propiedades con telas metálicas para impedir que al salir se perdieran y en aquellas hectáreas los animales corrían, jugaban y comían y defecaban en plena libertad. A veces cuando pasábamos por esas propiedades salían a vernos pedros ladrando enfurecidos, por si osábamos pasar a su propiedad y se agradecía la tela metálica que nos protegía de ellos.
Los gatos maullaban ronroneando mimosos y alguna vez los pequeñines se esforzaban por salir al camino jugándose la vida. En los balcones de los pueblos perros y gatos miraban el trajín la calle asomados a esos balcones y todos estábamos acostumbrados. Pues ahora se ha aprobado una Ley en España, como no, que gatos y perros no pueden estar en los balcones ni en las terrazas, y si se incumplirá se multará al dueño con una multa inicial de cincuenta mil euros. Así estamos por aquí luchando por no perder lo que tenemos. Personalmente esa Ley es tan absurda que nadie .nadie la comprende. Debemos tener un coeficiente sin apenas masa gris en nuestro cerebro, porque si no es así no comprendo ese castigo impuestos en aras de proteger a los animales.
En fin que febrerillo loco ha debido influir en ese parlamento español para tal aprobación.
Natividad Cepeda
No hay comentarios:
Publicar un comentario