miércoles, 25 de noviembre de 2020

hoy con la escritora Ángela Reyes

lunes, 23 de noviembre de 2020

Repasando lo acontecido en éste tiempo de pandemia

   

Ayer el sol  calentaba las paredes heladas de un domingo de noviembre de mi pueblo manchego. Aquí no hubo manifestación en contra de la Ley Celaá saliendo caravanas de coches  en contra de esa Ley que agrede el pensar de millones de españoles.

En la capital de mi provincia si salieron los coches a la calle a protestar y me dijeron que se optó por sumarse en la capital para sumar fuerzas. El domingo 22 de noviembre el clamor fue casi unánime  en esta España empobrecida y donde la gente se siente olvidada y arruinada. Nos callamos. Se calla el personal por miedo a la pandemia y a juntarse y contagiarse de este maldito virus que sigue sembrando muerte, no solo de ancianos también de jóvenes y algunos niños. Niños que en estos lares nuestros no podemos perder porque nos faltan en la estadística fría, no solo en España, también en esta Europa acomodada y egoísta que ha tirado por la borda del olvido los valores por lo que fue respetada, admirada y hasta en ocasiones odiada porque denunciaba lo que estaba mal.

Aquí en mi pequeña ciudad, donde casi todos piensan que son el ombligo del mundo, los domingos aún una parte importante asistimos al templo para seguir la misa del domingo. Es casi un milagro que en mitad de esta niebla que nos nubla nos acerquemos a orar comunitariamente sin temor a los reglones que soterradamente persiguen la liturgia de los cristianos de muchos lugares del mundo.

No es levedad acudir a la iglesia, pequeña en dimensiones, si se compara con la catedrales, pero lo maravilloso es que el templo, ahora con un aforo restringido, se llena de creyentes de todas las edades. Buscamos esa gracia que nos deje paz a pesar de tantos desatinos e incertidumbre. El domingo pedimos por  los que nos gobiernan porque esa inhumana Ley de la ministra Celaá, se consiga pararla. No duelen los miles de niños que se quedarán sin la asistencia adecuada si cierran los centros de educación especial… Y los miles de colegios concertados de pueblos y ciudades adonde nuestros niños y jóvenes asisten.

la cuestión elemental es que la mayoría son con ideario católico y son elegidos por familias creyentes por lo que el cierre es cuestión de ideología y no de mejorar la educación, y mucho menos de ahorrarse euros, ya que esa escuela le sale al estado español más económica que la pública.

En esta niebla que nos nubla los ojos está eliminar el castellano como lengua vehicular…Tamaño error  a quienes perjudicará será a las clases más bajas y desfavorecidas de España que residan en las comunidades separatistas, ya que el catalán y el vasco solo lo hablan unos escaso miles de ciudadanos y nadie, fuera de sus territorios, ni lo hablan ni leen. Es más, hace algunos años en una ciudad catalana se quejaban unos jóvenes de ignorar la lengua cervantina por lo que temían salir al extranjero con el equipaje gramatical del catalán.

Cuestiones elementales todo lo expuesto y que sin hacer comparaciones de los millones parlantes en el mundo que hablan español, está visto, en éste momento, que solo las clases pudientes  son las que sí educan a sus hijos en colegios privados y hablando correctamente el español. No así, las clases populares, que les es imposible acceder  por el coste elevado que no pueden pagar. 


 

Precisamos para cruzar por la vida un buen timonel, y ahora vamos a la deriva. Así lo escuché al salir de la misa dominical en un grupo de  gente reunida en la acera del sol.  Una mujer relataba que ella había pasado el coronavirus y  con voz  angustiada decía como en marzo pasado, estando ella ingresada, había visto morir a personas en el pasillo del hospital, sentadas en una silla porque faltaban camas y enfermeros y médicos, para atender a tantos contagiados.

Habíamos rogado por casi todos los problemas acuciantes que estamos padeciendo, el desempleo, la pandemia, por los políticos para que acierten y legislen en favor de nosotros, los de abajo, porque somos como un árbol. Si el árbol carece de raíces fuertes se vendrá abajo, y si las tiene sólidas, el árbol aguantará fríos y tormentas, vendavales y calimas…Escuchado recordé un árbol que hay en un paseo de mi pueblo, grande como una torre y fuerte como un castillo, por la envergadura de su copa. Sus raíces amplísimas asoman afuera y es bello contemplarlas porque  en esas raíces está la sabiduría de la naturaleza.

Fugacidad humana alimentada de soberbia apisonando derechos y libertades en éste principio de siglo XXI donde una vez más la persona  poco importa frente al poder y el dinero.

 

Natividad Cepeda

sábado, 14 de noviembre de 2020

Tarjeta de presentación de una mujer artista de Tomelloso Inmaculada Lara Cepeda “MAKU”




Tomelloso tiene la pasión del arte con nombres  conocidos local, provincial, regional, nacional e internacional entre escritores, poetas, pintores y escultores, casi siempre hombres, también hay mujeres en Tomelloso creadoras  en las artes escasamente  promocionadas casi silenciadas en el panorama actual. Uno de esos nombres es el de Inmaculada Lara Cepeda "MAKU” Nacida en Tomelloso (Ciudad Real). Artista plástica e Intermedia. Arte Sonoro. Performer. Poeta.  Es de las escasas escultoras castellanos-manchegas que tiene obra expuesta en ciudades diversas creada cara al público, por ser obra seleccionada en simposios nacionales e internacionales, con la particularidad sorprendente, de no tener obra alguna en Castilla-La Mancha, exceptuando  el busto de la “Bella Quiteria” en el Molino de la “Bella Quiteria de Munera.   

Lara Cepeda “Maku”, es Licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca  en la especialidades de escultura en general y audiovisuales, art media y arte sonoro, siendo alumna de la profesora y artista Concha Jerez,. También  del artista, docente e investigador Antonio Leonardo Platón y del desaparecido escultor Hipólito Pérez Calvo. Además, Lara Cepeda “Maku”, es Técnico Superior en Artes Aplicadas a la Escultura por la Escuela de Artes de Ávila. Fue  Galardonada con el prestigioso Premio Internacional para artistas "Antonio Gala" para Jóvenes Creadores. 

Ha realizado todas las especializaciones oficiales existentes en España referente a la escultura, vivió varios años viajando, estudiando y trabajando en todo el territorio nacional. Entre esos lugares  en la comarca del mármol de Almería, una de las mayores de Europa, donde incluso aprendió técnicas industriales a gran escala con maquinaria industrial profesional en la Escuela del mármol de Andalucía CEMAF (2007-2009), para combinar con la educación artística más tradicional y manual, como por ejemplo grúas que movían bloques de piedra de toneladas. E incluso siempre que pudo, frente a un mundo de difícil acceso para la mujer, y lleno de prejuicios, estuvo en contacto a pie de cantera con los maestros canteros  para que le enseñaran las técnicas ancestrales de apertura de bloques de varias toneladas y aprender el saber de lo escondido y ancestral que aun hoy, se continúa perdiendo. Realizó su aprendizaje con las buenas gentes llenas de generosidad de las Canteras Zarzoso, de Villamayor (Salamanca). Durante años ha venido participando en numerosos simposios de escultura de piedra, generando esculturas de ARTE PÚBLICO_ESCULTURA MONUMENTAL que se pueden contemplar actualmente  expuestas en España y Portugal.

 Barco papiroflexia en granito: O Grobe

Pese a que sus planes iniciales eran continuar trabajando la parte física de la escultura y la intelectual como profesora en la universidad y artista, la crisis del 2008 hizo que todo el sector de construcción incluido la piedra y la cultura cayeran en primer lugar, cerrando grandes galerías, museos, casi todas las fábricas del sector profesional en España, incluida la comarca del mármol de Macael de España, de las mayores de Europa y con ellas los profesionales de la piedra. 

Como otros muchos artistas profesionales o expertos en ámbitos de gran especialización como ciencia o educación se produjo la mayor parte de movilización al extranjero de estas generaciones. Esto hizo que la escultora  adelantara el plan futuro de hacer más incursiones en el extranjero tanto como artista y como profesional de la educación, aunque ya había trabajado como escultora en Portugal en el Simposio Internacional de Escultura Vila-Vicosa 

En cuanto vio una continuación del camino en Alemania trabajando la restauración de la piedra a través de una beca profesional europea de empresas Leonardo Da Vinci- en el Steinmetzzentrum en Königslutter (Alemania) 2009 , así como docente en Freie Werkschule Meißen (Alemania) 2012, y más tarde durante varios años y actualmente, en Humboldt-Gymnasium Eichwalde (Berlin) 2020 enseñando arte y/o español para extranjeros.


 

Es en Alemania donde ha vivido y vive, una segunda etapa como artista multidisciplinar – para lo que se había educado- de forma muy intensiva introducida en ámbitos internacionales trabajando conjuntamente  durante varios años de forma ininterrumpida con otros artistas alemanes y de todos los lugares del mundo en una maravillosa e enriquecedora torre de babel cultural, realizando trabajos de Performer individuales y colectivos.

Es conocedora de la performance desde la práctica de las artes plásticas y visuales ya que hoy se consideran otra disciplina artística más, como el arte sonoro o la pintura, en la que se usa el cuerpo como herramienta de trabajo.

En el centro cultural “ Atelier Schwartz “Dresden(Sajonia) ha intervenido en exposiciones y acciones de arte sonoro, lecturas poéticas internacionales e intervenciones en conciertos con músicos  como pintora, escultora, o performer y participado en libros  y posdcast desde el comienzo de su carrera

Colabora activamente en proyectos poéticos y de ilustración. Combina su intensa actividad artística y expositiva entre España y Alemania con la colaboración en proyectos de investigación y docencia así como la investigación en el arte sonoro siendo algunas de sus obras de arte sonoro recogidas en Podcast por la universidad de Salamanca.

Trabajó con otros profesionales organizando durante años jornadas muy exitosas de intercambios culturales de idioma, ya que trabaja como profesora de español para extranjeros, mezclando jornadas culturales diversas, mostrando su apertura a través de conciertos de música, exposiciones, lecturas poéticas, talleres culturales de cine, arte, etc. en “El living project“ Dresden,  así como a través de exposiciones individuales „Creative Corner“, 2014 Dresden. 

La bella Quiteria: Munera

 

La artista, Inmaculada Lara Cepeda “Maku”, nunca deja de formarse, especialmente en los últimos años, donde algunas técnicas tradicionales de las artes plásticas, ya han dejado de utilizarse e incluso están desaparecido debido a la gran toxicidad y peligrosidad de la mayor parte de ellas. Así como el cambio y ruptura del sistema profundo en los cimientos del mundo del arte, un cambio de paradigma, la economía de mercado, la aparición industrial de nuevos materiales menos pesados y tóxicos con más posibilidades y la profesionalización de los medios digitales. 

La realidad es, que como muchas otras mujeres, de ayer y de hoy, a pesar de su capacidad creadora demostrada en las obras expuestas es una desconocida en su tierra de origen. Las obras monumentales colocadas en diversas ciudades muestran no solo su capacidad creadora, también el tesón y el esfuerzo de ésta escultora castellano-manchega que ha esculpido al lado de hombres tallando piedra, mármol, granito, hierro y la amplia materia que es arte cuando se contempla.  Esas obras y su trayectoria es tarjeta de presentación de una mujer de Tomelloso y de la Comunidad de Castilla-La Mancha, sin fronteras, para dar a conocer el lugar de donde proviene.

                                                                                              

 

  Natividad Cepeda

 

 

 

 

Lugares  a continuación detallados donde se pueden contemplar algunas de sus obras escultóricas.

 

- “Tren” 200 * 70 * 73 cm- Acero y Piedra Arenisca. Villamayor de Armuña (Salamanca) 2003
-“Papiroflexia I” Series 240 x 65 x171 cm-Granito- El Grove- (Pontevedra) 2004
-“Bella Quiteria” 160* 60* 40 cm- Hormigón. “Molino de la Bella Quiteria” Munera (Albacete). 2005
-“Istmo” 250 * 65 *62 cm – Piedra Caliza. Valdesimonte (Segovia) 2005
-“Happy Machine II” Series- 120x 140 x 90 cm-Mármol- (Almería) 2008
-“Happy Machine III” Series- 140 x 120 x 100 cm-Mármol- (Portugal) 2008

Y participado en

 -XV Simposio Internacional de Escultura O Grove (Pontevedra) -2004
-IV y V Simposio de Escultura Villamayor of Armuña -Salamanca- 2004 y 2005
- I Simposio de Escultura Valdesimonte (Segovia) -2005
-III Simposio de Escultura Villamayor of Armuña -Salamanca- 2003
- I Certamen de escultura-Fines (Almería)- 2003
- II Certamen de escultura-Fines (Almería)- 2004
-V Simposio de Escultura Macael 2008
- Simposio Internacional de Escultura Vila-Vicosa (Portugal) 2008

 

 

 

Hoy con Nieves Fernández Rodríguez

Hoy con Pilar Aroca

viernes, 6 de noviembre de 2020

Noviembre y la humildad del otoño vuelve a sumar lágrimas y llantos.


 De pronto ha llegado el otoño vestido de noviembre con su corazón de hojas caídas creando una alfombra de ocres y amarillos por calles y parques al margen del devenir del mundo humano.

Europa late entre la pandemia del coronavirus que va y viene por nuestras ciudades contagiando a unos y otros sin parar en su recorrido mortal. Nos despertamos con la incertidumbre de no conocer al bicho del Covid19 ni al terrorista que decapita y asesina a los que dentro de un templo imploran ayuda a Dios en la tierra de sus mayores. Ante las macabras noticias nos cobijamos en las noticias de internet escribiendo a  unos y otros en los portales de   whatsapp, Facebook, Instagram o similares buceando en la búsqueda de la verdad y, comprobamos que hay bulos, mentiras y descredito en casi todos los espacios.

Europa es un lugar no demasiado grande en los mapas mundiales. Es un continente envejecido porque los valores fundamentales que aseguran la vida están prostituidos. No nos nacen niños; niños rubios , morenos, pelirrojos, flacos y gordos, altos y bajos…Niños como lo fuimos  nosotros hablando nuestros idiomas y conociendo nuestra historia, mejor o peor, pero nuestras raíces, las que nos hicieron culturalmente como somos, como fuimos y como deberíamos seguir siendo.

En aquella Europa la familia existía y había lugar para que nacieran los hijos y lugar para envejecer los viejos rodeados de los suyos. Ahora dependemos de los guetos sociales, guarderías para los niños y residencias para los ancianos. Todos, o casi todos, reivindican derechos. Derechos al no nacer y derecho a morir antes de que seamos llamados por Dios, si creemos en Él, y por la naturaleza si somos agnósticos o ateos. Asistimos al miedo solapado al otro. Al que no conocemos. Al que se cruza con nosotros y evitamos mirarlo porque no nos fiamos de nadie. Y llevamos mascarillas, unos sí y otros a medias, o ninguna, porque tenemos al bicho del virus campando a sus anchas por el mundo y por Europa.

En esta España de mis amores no hay día que no nos levantemos con una ruina personal del vecino o del amigo, del hijo o del padre al que han despedido…Nuestra economía es una ruina y avanzamos a la miseria en mitad de la falta de entendimiento de los gobernantes a los que parece que no les importamos, excepto para cobrar impuestos. Nosotras las mujeres, arrimamos el hombro como siempre  hemos hecho, codo a codo con nuestros hombres, pero no es suficiente porque el humanicidio solapado y cruel continúa.


Pulsamos opiniones entre nefastas proclamas que se pierden en espejos manchados de mentiras. Porque no es posible tener la energía de un joven cuando se ha dejado de serlo, ni la sabiduría  del anciano que ha conocido las etapas de la vida. Y perdemos todos. Perdemos el abrazo y el beso que no podemos dar, sintiendo que nuestro amor se nos desliza sin esas manifestaciones, como el agua que no podemos guardar en nuestras manos.

Aceptamos, algunos aceptamos, el sacrificio de no asistir a reuniones, incluso familiares. No así otros que olvidan que nos jugamos la vida en esta ruleta rusa de la pandemia donde todos somos probable víctimas. Y son absurdas las manifestaciones de autosuficiencia de aquellos que no cumplen la norma exigida. Se equivocan y por esa sinrazón los muertos continúan y se malogra la economía.

Los muertos, nuestros muertos, de los que apenas queremos hablar son silencios de abrazos y de besos. Y hasta falta el respeto a ellos, a los muertos de cada día, cuando se incumplen las normas impuestas; impuestas para salir de la pandemia y todo está ocurriendo porque nos falta corazón para amar a los demás.

El otoño nos muestra las calles alfombradas de la belleza de las hojas caídas en la prudente espera de su desaparición; admitimos ese ciclo rotativo de las estaciones sin aplicarlo a nuestra vida. No aprendemos a ser prudentes sin arriesgar la vida nuestra y la de los otros. Olvidamos que tener valor es asumir lo que nos llega y ahora nuestras actuales circunstancias no exige ese valor del que carecemos. Nuestra sociedad es una sociedad débil porque depende de los recursos que le imponen e ignoramos las amenazas que se ciernen en rededor. Nuestra vieja Europa se muestra débil ante esta peste pandémica y terrible, nos hemos confiado al Estado y como ciudadanos somos semejantes a niños rebeldes y mimados. Estamos encima de un avispero y no queremos verlo porque el mal, queremos que nos lo quiten otros.

De las muchas correrías  vividas hemos vuelto a sumar lágrimas y llantos; no aprendemos de las heridas sin cicatrizar que dejó la primavera en marzo.

 

                                                                                                 Natividad Cepeda